La Autoridad Europea de Seguridad de los Alimentos (EFSA) ha propuesto una reducción del contenido máximo autorizado de zinc en la alimentación de todas las especies animales. 

 

 

Los niveles propuestos reducirán en un 20% la cantidad de zinc liberado al medio ambiente por las deyecciones. La reducción recomendada en el contenido máximo permitido de zinc en la alimentación garantiza la seguridad de los consumidores, la salud y el bienestar animal, y no afecta a la productividad de los animales. 

La evaluación del riesgo realizado por la EFSA para proponer esta reducción, se ha realizado tras una revisión de documentación y datos que se han recibido desde las autoridades nacionales de los países miembros.